domingo, 10 de octubre de 2010

Voy a discutir

Mi cabeza no para de ejercer presión dándome punzadas y cortándome la respiración.
Las lágrimas se derraman por unas mejillas manchadas de colorete borrado.
Quisiera tener más paciencia, y más criterio de selección, sobre lo que debe afectarme y lo que no.
Pero las sábanas me traicionan y fomentan mi pena nocturna, en un arranque de arrepentimiento y de dudas, que nadie sabe de dónde vienen.
Estoy cansada de temer sus dudas.
Estoy cansada de llorar las de los demás.
Solo quiero acostarme y poder dormir en paz.
Voy a discutir con la almohada y quiero saber si mañana podré seguir siendo su amiga, o debo alejarme sin más, como ya hice otras veces, en noches empañadas.
...Brown Sugar...

1 comentario:

blacky dijo...

hay veces que sólo podemos soltarlo todo antes de tomar una decisión. Calma pequeña.