martes, 30 de agosto de 2011

Evolución

Empezamos el blog con ganas, y varios años atrás. Hemos crecido, nos guste o no, hemos aprendido de los dramas. Aunque eso no quiere decir que no sigamos tropezando de vez en cuando.

Siempre hay piedras en el camino y resbalones. Pero hemos aprendido a sortearlos, o al menos, a que nos hagan menos daño.

Disfrutamos, cada una a su manera, vivimos, experimentamos pero sobre todo hemos evolucionado. Sobrevivimos a los nuevo tiempos. A nuevos hombres y luchamos con fantasmas que a veces salen de debajo de las piedras, o nos esperan en el descansillo de casa.

Si algo nos diferencia es saborear, antes teníamos tanta prisa por vivir que nos olvidábamos del resto.

Nuestro blog es cómo la energía, no se acaba, sólo de transforma.

*blacky*


sábado, 6 de agosto de 2011

No más drama

Me cuesta admitir los verdaderos propósitos de mis acciones.

Iniciamos un blog para tener una charla a distancia con mis amigas.
Para poder saciar nuestras ganas de escribir los dramas y embrollos amorosos de una manera sana, despreocupada y quien sabe, alguna divertida.
Pero en el fondo de todo eso, solo se escondía (y tampoco tanto)
un desahogo emocional.

Porque hablarle a las paredes no es normal, y no tengo tanta privacidad como para poder hacerlo todos los días sin miedo a que me llamen loca, y con razón.

Ha dado resultado.

Escribir puede que sea mi paso para reconocer muchas cosas.
Me las digo a mí misma muchas veces.
Pero todas esas muchas veces también me ignoro.
Sin embargo cuando me leo, me saben a lecciones.

Tener un pseudónimo ayuda, porque te puedes mojar un poco más.
Aunque llegados a un punto, no hay humedad en absoluto.
No hace falta ser muy listo para saber quién es cada una.

Ahora ya nadie escribe.

Eso puede significar dos cosas.
Uno-No quiero que nadie sepa lo que siento ahora mismo.
Dos-No hay nada sobre lo que escribir.

La mayor parte de las historias son frustraciones o búsquedas. En otras ocasiones, drama.
Si no hay nada sobre lo que escribir puede que sea por una única cosa:


Ya no hay drama.

Todo ha cambiado.
No tengo tantas necesidades.
No tengo absolutamente ningún drama.
Ni ganas de manifestarlo si lo tuviera.

Ahora me dedico a disfrutar.

viernes, 29 de abril de 2011

pajarita


Puedo quedarme descalza andando entre recuerdos
pasear entre baldosas rotas y charcos
mancharme los pies y las piernas
mojarme de ilusiones las rodillas
acariciar besos ya dados
rozarme con tu barba de tres días
pero nunca girar mejillas a lo que vendrá...

*blacky*

martes, 26 de abril de 2011

Adagio en G menor


Albinoni siempre me pone tensa, y mucho más cuando ayer sonaba desafinado en una plaza de confusión y miradas que a pesar de ser opacas, para sus ojos parecían completamente transparentes.
En cierta manera el violín me despierta la cordura, me grita y me ataca, ayer con chirridos incompatibles con mi sosiego que me llevaban a intentar unir los hilos rotos de un pantalón diseñado para seguir así toda su vida.
Aquel hombre parecía avivar aquella melodía pretenciosa. Y he de reconocer que tumbó muchas de mis afirmaciones y me gustó.
Había hecho lo que hasta ahora solo habían hecho los violines. Remover mi paz.

...Brown Sugar...

viernes, 25 de marzo de 2011

Escrito en alguna parte


Era rubio, de nariz fina y picuda, delgado, con el pelo fino y puntas afiladas. Si me hubieran preguntado habría dicho rotundamente que no me gustaba, demasiado delgado. Su mirada perdida no me interesaba hasta el momento en que sus ojos le traicionaron y me miraron a mí más de diez segundos.

De repente sus manos rozaron mis manos y me apeteció besarle. Quizá sus besos fueran cálidos. Quizá sus yemas quemaran mi piel.

Desde ese día no pude dejar de pensar en él de esa manera. Sus ojos se clavaban en los míos. Solo cuando yo dejaba de contar mi historia.

Transcribía con todo detalle lo que yo decía, y me hablaba con una voz grave y limpia. Una voz que casi no le correspondía. Escribía a máquina. Me tomaba declaración de algunas informaciones que yo poseía y que a él le interesaban.

Juraría que ese hombre querría algún día hacer realidad mis pensamientos, pero eso debe de estar escrito en alguna otra parte.

...Brown Sugar...

miércoles, 9 de marzo de 2011

aquella noche


Un trayecto de autobus, un poco aturdida y resacosa y de repente aquella noche, aquella noche con todos sus recovecos, como un juego de luces girando, aquella noche y el sofa, y las copas y la inseguridad segura de que iba a pasar, aquella noche con sus canciones y las notas de fondo y la silla que giraba, aquella noche y tus labios, y los mios, y un mini trayecto de subida y todo a oscuras y nosotros y aquella noche...

*blacky*

lunes, 28 de febrero de 2011

Alguna extraña razón

Por alguna extraña razón, él ya no es lo que era.
O siempre ha sido así y yo no lo he visto hasta ahora.
No me decepciona la pasividad.
Me decepciona la no lucha.
La verdad es que siempre me han conquistado los chicos tipo contra viento y marea, no importa el tiempo que tengan, las posibilidades o habilidades, lo que cuenta, como en toda aventura, es el intento de conseguir llegar a META.
De hecho nunca me gustaron los guapos por ese motivo, precisamente los feos luchan más por llegar más lejos, porque parten de una base que ellos creen en su contra, y para contrarrestar lo que no tienen, ponen mucha más carne en el asador, y todo ello termina siendo una barbacoa multitudinaria.
No me gustan las historias de príncipes azules, yo siempre fui más de Hércules. Personas que avanzan en la vida y en sus relaciones, con pequeñas pruebas que les hacen avanzar y en definitiva, les hacen más fuertes.
En mi batalla parece no haber oponente, y ya se sabe que sin oponente, no se puede ganar una guerra, la cual nunca se puede dar.
Y sin esos encontronazos, es muy difícil escribir la historia, tener un pasado ni luchar por un futuro.

...Brown Sugar...

viernes, 11 de febrero de 2011

El mejor edredón del mundo

El vaho empaña los cristales, y el viento sopla fuera. La noche ha caído antes de tiempo y nos persigue muy cerca. Decidímos proseguir la marcha, sin destino claro, virando y dando vueltas.
Suceden nuestras ideas en dos mentes que piensan sin cesar y manos que hablan solas. Ambas mentes les dan alas, les prestan sus plumas y las contagian de magía.

Nos detenemos de pronto, el motor en silencio, las notas se proceden susurrándonos lo que está por llegar, lo que el tiempo no tiene entre sus dedos, ni las páginas han escrito aún. La melodía augura nuevos tiempos y nuestras manos se abrazan, y nuestros dedos se rozan.

Y el aire sigue soplando y nosotros en un mundo paralelo, en un submundo en el que ambos respiramos al compás y susurramos a gritos. En un mundo que encontramos de pronto, en un mundo sin pintar, sin amueblar en el que todo está por descubrir.

Los miedos se han quedado rezagados, y hemos cargado los bolsillos de buenos propósitos y hemos decidido seguir caminando, sin mapa, sin norte, y con toda la intuición del mundo.

El vaho se apodera de los cristales de nuevo y la noche nos vigila, se encuentra sobre nuestras cabezas y yo me quedo acurrucada, entre tus brazos tapada con el mejor edredón del mundo...

Blacky

viernes, 7 de enero de 2011

sin sueño


Me meto en la cama sin sonrisa, y venga a dar vueltas bajo las sábanas. Vuelta para un lado y para otro y el sueño no llega y las ideas se suceden sin cesar en mi cabeza. Ideas buenas y menos buenas, ideas disparatadas y otras mucho más sensatas y objetivas.

Al final no consigo conciliar el sueño profundamente y sólo a medias entorno los ojos e intento dejar de girar. Al fin y al cabo qué le vamos a hacer si cada uno lleva su ritmo y velocidad.

Suena el despertador y tengo la sensación de no haber dormido, total otra vez despierta y con la cabeza más serena y con menos sensación de descoloque.

Será el sueño...

*blacky*

lunes, 20 de diciembre de 2010

Mi camisa blanca


Me gusta quitarme los zapatos y que tu bajes la cremallera de mis botas con una mano. Me gusta cuando me cuentas tus cosas e ideas, y me sonries muy cerca y me acaricias. Me gusta conducir contigo al lado, con mi falda presumida, un poco más arriba de lo debido. Me gusta meterme debajo de tu edredón y que me abraces. Me gusta ver películas a medias contigo. Me gustan tus dosis de flipado.

Me gusta como desabrochas mi camisa blanca...

*blacky*

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Escribo poco


Ultimamente escribo poco, he estado echándole un vistazo al blog y han disminuido el numero de entradas considerablemente. Escribo poco porque he dejado de tener rabia contenida. Escribo poco porque he empezado a inaugurar momentos que valen la pena. Escribo poco porque tengo menos cosas que soltar, y más que disfrutar. Escribo poco porque las sonrisas se escurren por la comisura de mis labios. Escribo poco porque tengo las manos ocupadas con caricias que soltar. Escribo poco porque duermo menos. Escribo poco porque trabajo más. Escribo poco porque tengo menos necesidad de hacerlo. Escribo poco porque siento más. Escribo poco porque he cambiado convers por tacones y vaqueros por medias. Escribo poco porque viajo más.

Pero en el fondo todos son excusas...

domingo, 14 de noviembre de 2010

Una vez en el tiempo


Un comienzo es una etapa que sucede una vez en el tiempo de un ciclo vital.
Un comienzo suele ser mágico, hipnotizado por el futuro incierto e idealizado y el dulce sabor del cariño y afectuosidad que se siente siempre en un principio.

Siempre me han gustado. Son mi parte favorita de las relaciones, cuando aún no corren el riesgo de deteriorarse o acostumbrarse, cuando no se pierde nada porque aún no se tiene.

Por eso creo que me encanta el género romántico, lleno de historias distintas de comienzos, de palabras impetuosas y de inercia, de espontaneidad y locura.
Tengo ganas de verte. No puedo dejar de pensar en tí. Eres increíble. Eres preciosa. Me vuelves loca. Tengo miedo. Creo que te quiero.

En los comienzos se dicen cosas que 4 meses después nunca se vuelven a repetir, y me encanta recordar las palabras de los comienzos, cuando había magia y complicidad.

A veces reconozco que me gustaría dejarlo todo y volver a tener un comienzo, y hacerlo continuadamente y tener que empezar de nuevo. Me gustaría volver a sentirme como una vez en el tiempo.

Un comienzo donde hay sorpresas y apoyo incondicional, donde hay besos jugosos, dónde el corazón parece dar vuelcos, un comienzo donde sientas que no puedes despegarte de él, que después de pensar todo el día en él, llegue ese mensaje que se traduzca en un "si, yo también".

Los comienzos son intensos y entrañables, como un cuento que se cuenta una vez en el tiempo.
Pero ¿cuánta verdad hay en un cuento?

...Brown Sugar...