jueves, 20 de agosto de 2009

Sólo Sentados


Sentados en aquella sala de cine, la proyección recien empezada, y varias personas repartidas por la sala. Sentados, mirando de frente, sentados como amigos, sólo sentados. Con la mirada clavada en la pantalla y la mente sin parar de pensar. Una mano torpe, una mano directa, una caricia sin importancia, o dos, o tres, y una mirada de frente, y otra vez pensamientos entre cruzados, y esa mano deslizandose por la rodilla, bajando hasta el tobillo, introduciendose entre medias de las sandalias. Sentados, con gente alrededor, bastante solitarios por cierto, sentados con una versión original de fondo. Callados, sentados en el cine, sin palomitas, sin bebida. Hablando, pero callados. Respiraciones entre cortadas y miradas que hablaban muy alto. Sentados, callados pero sin dejar de hablar. Otra mano habladora, otra mirada intermitente y unos subtítulos en blanco, y aquellos chinos pegándose, y un príncipe que era princesa, y nosotros sentados. Con los pies en la butaca, y los chinos sin parar de gritar, y un oasis, y tú, y tu mirada otra vez, y tú mano. Y una peli empezada, y una carrera a la calle, y una peli sin acabar, y tu y yo riéndonos de los chinos, y de estar sentados, y del calor y de poder hablar hablando y no mirando, y mis fotos, y las tuyas, y una horquilla rescatada, y Madrid con calor, y el mundo a su bola. Sentados, seguimos sentados.

*just black*

1 comentario:

Brown Sugar... dijo...

Yo estoy harta de estar sentada...